Nanas de Heisenberg

Hoy Espronceda está pasando la ITV de su coche. Pero no la pasará, por descuidado, por poeta. Su coche ya es viejo de cuatro años, está "impoluto", pero tiene un defecto grave en el neumático. Espronceda va a un taller y refiere su fracaso circulatorio. El neumático ya no se fabrica.

Hay que pedirlo a Alemania. Allí se inventó la rueda. Espronceda, poeta de la desintegración del átomo, se pone los auriculares y escucha.

Escucha nanas de Heisenberg.

En la hora del ocaso

Hay regiones del alma humana que se han oscurecido, la luz ya no incide sobre ellas. Una es el ansia de Absoluto, el anhelo de perfección, de eternidad. Eso está totalmente extinto. El irresistible poder de la Tecnología ha barrido por completo una dimensión humana que estuvo más o menos viva durante siglos. No ha cambiado nuestra condición de seres finitos, efímeros. Nuestro horizonte se ha reducido drásticamente, pero no nos importa, porque no nos damos cuenta.

Cita de Nietzsche

Ah, die Vernunft, der Ernst, die Herrschaft über die Affekte, diese ganze düstere Sache, welche Nachdenken heisst, alle diese Vorrechte und Prunkstücke des Menschen: wie teuer haben sie sich bezahlt gemacht! wieviel Blut und Grausen ist auf dem Grunde aller “guten Dinge”!

Ay, la razón, la seriedad, el dominio de los afectos, todo ese sombrío asunto que se llama reflexión, todos esos privilegios y adornos del hombre: ¡qué caros se han hecho pagar!, ¡cuánta sangre y horror hay en el fondo de todas las "cosas buenas"!...

Le vuayás de Dideró


Aller et retour. No se murió por el camino. La de maldiciones que debió de echar durante el puñetero vuayás.


Whitman

Esa sociedad de muchedumbres que Tocqueville observó, intuyó, predijo tenía, sin embargo, su poeta: Walt Whitman. I am large, I contain multitudes. Un ejemplo entre muchos:

Crowds of men and women attired in the usual costumes! how curious you are to me! 
On the ferry-boats, the hundreds and hundreds that cross, returning home, are more curious to me than you suppose; 
And you that shall cross from shore to shore years hence, are more to me, and more in my meditations, than you might suppose.