Tonterías

El azar es obra del azar. El azar es causa y efecto de sí mismo. El que entienda esto que me lo explique.

La razón es una anomalía. "Fulano ha perdido la razón", esa no es la cuestión. La cuestión es: ¿cómo es que llegó a tener raciocinio? Locos egregios!

Pensamientos fabricados en alemán, como Audis o BMWs. 

Mi visión del mundo es materialista, es la visión de Lucrecio. No creo que el mundo sea obra de un Ser Supremo, sanagustínico y santotomásico. Creo que el mundo es un saco de caos y un asco.

Considero.

Quitaría a la lujuria o a la gula de los siete pecados capitales y los cambiaría por la vanidad. La vanidad me parece inmensamente peor.

Estoy convencido de que me encuentro muchísimo más cerca de la muerte de lo que creo.  

Hay que vivir entre los hombres con un pie dentro y otro fuera de la sociedad. Si tienes los dos pies dentro no tendrás vida propia, ni intimidad, y si tienes los dos pies fuera estás perdido.

El pensamiento es progreso, nunca se detiene, tantea, olfatea. Fijarlo en escritura es atraparlo. Pero así lo perdemos.

Los nietos de Petrarca

En un bar la TV está puesta en un canal de música. Esa música de consumo que Roman Gubern llamó con mucha gracia y acierto "chicle para los oídos". Medio escuchando las letras de esas canciones -que son todas iguales, un joven macho llora sus cuitas amorosas- se me ocurrió pensar que esas letras cansinas que se fabrican industrialmente en factorías discográficas tienen como fuente a los trovadores provenzales y a Petrarca. Quién lo diría: Bustamante, Bisbal o Sergio Dalma están bebiendo de las aguas del autor del Canzoniere. Y es que el Amor no ha caído del cielo, como todo lo humano tiene su historia.